3 técnicas de caza de las arañas

Tejer una red no es su única arma, así que te descubrimos tres técnicas de caza de las arañas, entre las cuales seguro que hay alguna que no conocías

Escrito y verificado por el biotecnólogo Alejandro Rodríguez.

Última actualización: 01 junio, 2019

El grupo de animales de los que hablamos en este artículo incluye más de 47 000 especies. Dicho esto, no es raro que, por tanto, se hayan descubierto y descrito varias técnicas de caza de las arañas. En este artículo vamos a descubrirte algunas de las técnicas más habituales y otras realmente sorprendentes.

Las arañas, animales depredadores

Este numeroso grupo de animales pertenece a la clase Arachnida, comúnmente conocidos como arácnidos. Dentro de esta clase se incluyen otras especies de artrópodos como las garrapatas y los escorpiones. La diversidad de las arañas es tan inmensa que se pueden encontrar en todos los rincones del planeta, con la excepción de la Antártida.

Otro rasgo común a todas las especies es su naturaleza depredadora. Pero aunque el fin sea el mismo, existen varias técnicas de caza de las arañas, si bien muchas de ellas comparten un elemento común: la producción y uso de seda, con la que tejen telas que usan para atrapar a sus presas. Una vez capturadas, las arañas inyectan unos jugos digestivos en el interior de las presas, que ayudan a disolver el contenido que posteriormente absorberán.

La tela: una de las técnicas de caza de las arañas más comunes

Sin duda, la primera de las técnicas de caza de las arañas es la más conocida por todos. Mediante unas glándulas situadas en la parte posterior de su abdomen, estos animales producen un material proteico con una consistencia sedosa y bastante pegajosa. Esto les va a permitir capturar a sus presas con facilidad.

A pesar de que su visión no es muy buena, se aprovechan de unos órganos sensoriales situados en sus patas para detectar las vibraciones que se producen cuando una presa queda atrapada en la red. Es en ese momento cuando la araña entra en acción y captura a su presa, a la que persigue si es necesario hasta que está completamente atrapada.

La araña cara de ogro, lanzadora de redes

Nos adentramos ahora en una de las técnicas de caza de las arañas más inusuales hasta el momento. El ejemplar protagonista pertenece al género Deinopsis y su forma de cazar consiste en lanzar sobre las presas las redes que ellas mismas tejen.

Morfológicamente, estas arañas son bastante alargadas, y poseen dos grandes ojos que les facilitan la tarea de localizar presas en la oscuridad. Su técnica de caza comienza con la confección de una tela de araña corriente, pero que sostendrán abierta usando sus patas delanteras. A partir de ese momento, permanecerán inmóviles hasta que una presa active la trampa.

Es en ese momento cuando la araña cara de ogro ‘lanzará ‘ y cerrará la red sobre su presa, que quedará atrapada. Es un fenómeno imperceptible para el ojo humano, ya que ocurre en milésimas de segundo.

La araña cangrejo de pared, al acecho

Los miembros de la familia Selenopidae usan una técnica de caza donde no interviene la telaraña. En este caso estamos ante arañas que cazan al acecho, que esperan ocultas a que aparezca su presa. Su morfología está adaptada para tal fin, de manera que pueden alcanzar grandes velocidades en un corto período de tiempo, y así atrapar a la presa. Suelen ocultarse en el suelo o entre los pétalos de las flores.

De hecho, estudios recientes han confirmado que posee una de las técnicas de caza de las arañas más curiosas jamás vista: gracias a la disposición de sus patas, estas arañas pueden girar rápidamente en cualquier dirección para situarse de cara a sus presas, lo que aumenta notablemente la efectividad de la caza. Se cree que estas arañas poseen el récord de la maniobra de giro más rápida conocida para un animal.