5 curiosidades sobre la inteligencia de los gatos

Si alguna vez has visto a tus gatos y te has preguntado qué está pasando en esas cabezas, no estás solo. Los estudios cognitivos en animales están a la orden del día.
5 curiosidades sobre la inteligencia de los gatos
Luz Eduviges Thomas-Romero

Escrito y verificado por la bioquímica Luz Eduviges Thomas-Romero.

Última actualización: 12 julio, 2020

Los gatos son increíblemente ágiles y hábiles, pudiendo saltar cinco veces su altura mientras ganan equilibrio usando sus colas. También son capaces de correr hasta a 30 kilómetros por hora. Eso sí, ¡estas explosiones de energía las reponen durmiendo hasta dieciocho horas al día!

Incluso sus bigotes, que nos parecen bonitos, tienen una función práctica: medir el tamaño de una brecha para determinar si su cuerpo puede pasar.

Igual que a los humanos, todo el procesamiento de información que permite al gato su exquisita destreza tiene que ver con el control neuronal y con su capacidad de aprendizaje.

Aquí te mostramos 5 ejemplos de que la inteligencia en felinos puede ir mucho más allá de lo que en un principio se cree.

1. Los gatos tienen una notable capacidad de aprender de las experiencias

La inteligencia se define como la capacidad de aprender de una experiencia, retener ese conocimiento y usarlo para resolver problemas en un nuevo entorno. El órgano que media estas funciones es el cerebro.

En este sentido, se conoce que el cerebro felino ocupa aproximadamente el 0.9 por ciento de su masa corporal. Sin embargo, lo más importante para evaluar la inteligencia de una especie es el plegamiento de la superficie y la estructura del cerebro, no su tamaño.

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2. La estructura del cerebro felino y el plegamiento de la superficie es muy similar al de los humanos.

Es interesante conocer que la corteza cerebral no sólo gobierna las funciones superiores del pensamiento racional, sino también la resolución de problemas. Esta también es el área de almacenamiento para la memoria a corto y largo plazo.

Además, la memoria es cómo el cerebro almacena, recuerda y usa la información aprendida de experiencias pasadas. La memoria de largo plazo nos hace recordar los “qué”, “dónde” y “cuándo” de cada experiencia y evento específico de la vida.

Sorprende saber que estudios científicos han demostrado que los gatos pueden recordar y usar información de “qué” y “dónde” de experiencias vividas.

Estos felinos presentan aproximadamente el doble de neuronas en su corteza cerebral que los perros, que es el área del cerebro responsable del procesamiento de la información

3. No es tu imaginación: Los gatos pueden tener en mente un objeto y razonar dónde puede estar

Según varios estudios, expertos en conducta animal creen que la inteligencia de un gato adulto es comparable a la de un niño humano de 2 años.

En este sentido, diversas pruebas en laboratorio han demostrado que los gatos tienen reconocimiento de “permanencia de objetos”. Es decir, poseen conciencia de la existencia de objetos que no son directamente visibles. Así saben que si un objeto esta fuera de la vista, no significa que desapareció para siempre.

4. También pueden entender nuestros gestos

Si bien los gatos no entienden lo que estás diciendo con tus palabras, pueden captar tus gestos. Los investigadores han descubierto que comprenden los gestos humanos y los seguirán para encontrar comida.

En un estudio de 2005 se realizó una prueba para confirmar esta idea:

  • Los científicos presentaron a los gatos dos cuencos cerrados, uno de los cuales tenía comida para gatos y otro que estaba vacío.
  • Se permitió a los gatos acercarse y elegir uno de los cuencos mientras un investigador señalaba el cuenco con la comida dentro.
  • Casi todos los gatos siguieron la señal, escogieron el tazón correcto y obtuvieron la recompensa en forma de comida.

Esto sugiere que tienen lo que los científicos llaman “teoría de la mente”; es decir, la capacidad de atribuir conocimiento, deseos e intenciones a otros. En este caso,  los gatos descubrieron que el científico “señalador” estaba tratando de mostrarles algo.

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5. Contadores felinos

¡Los gatos pueden contar! Bueno, no exactamente. Un estudio investigó la capacidad de los gatos domésticos para distinguir entre la imagen de dos y tres puntos para obtener alimento:

Los resultados mostraron que estos pueden ser entrenados para discriminar entre las dos cantidades. Los autores de la investigación concluyen que los gatos no usan espontáneamente información numérica. Más que eso, parecen vincular las imágenes que varían conjuntamente con la cantidad para resolver la tarea.

Todos estos datos demuestran que los felinos domésticos presentan cierto grado de comprensión, asimilación, y resolución de problemas. Por ello es esencial tratar a nuestra mascota con integridad, cariño y comprensión. Ellos entienden tanto lo bueno como lo malo.


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