11 especies de iguanas

Al margen de la que se suele adoptar como mascota, hay alrededor de 40 tipos diferentes de estos reptiles, la mayoría de ellos pertenecen América.
11 especies de iguanas

Escrito por Yamila

Última actualización: 28 septiembre, 2022

Estos reptiles, que pertenecen a la familia de los Iguanidae, son endémicos de áreas tropicales. Son de sangre fría y pueden llegar a vivir alrededor de 20 años. Tienen un enorme parecido con sus parientes, las lagartijas, pero con la gran diferencia de que poseen un mayor tamaño y pueden ser bastante imponentes.

Además, la mayoría de las especies de iguana son excelentes escaladores y viven en los árboles. Sin embargo, otros ejemplares de mayor tamaño optan por estar en el suelo. En este artículo te informamos sobre algunas de las especies de iguanas que existen en la actualidad.

¿Cuántas especies de iguanas hay?

En total, existen poco más de 40 especies de iguanas que se dividen 8 géneros. Sin embargo, la taxonomía de esta familia aún se encuentra en discusión y es probable que cambie conforme avancen las investigaciones. De manera genera, la cantidad de especies por género queda de la siguiente forma:

  • Amblyrhynchus: 1 especie.
  • Cyrclura: 10 especies.
  • Iguana: 2 especies.
  • Sauromalus: 5 especies.
  • Brachylophus: 4 especies.
  • Conolophus: 3 especies.
  • Dipsosaurus: 1 especie.
  • Ctenosaura: 15 especies.

La mayoría de las iguanas son habitantes de América o de las islas cercanas a las regiones tropicales. Es más, algunas incluso son populares como mascotas. Entre las especies más famosas de esta familia se encuentran las siguientes:

1. Iguana verde (Iguana iguana)

Este lagarto arbóreo típico de Latinoamérica –desde México hasta Paraguay– puede medir dos metros de largo y pesar unos 15 kilos. Es herbívoro, aunque en estado salvaje puede comer algunos insectos pequeños ‘mezclados’ entre las hojas.

La iguana verde –foto que abre este artículo– es de ese color para poder mimetizarse con la vegetación de su entorno. Tiene las patas cortas terminadas en cinco dedos con garras muy afiladas para poder trepar sin problemas a los árboles. Es la más elegida como mascota.



2. Iguana marina (Amblyrhynchus cristatus)

Esta es otra de las especies de iguanas de esta lista, y es el único lagarto dependiente del mar, ya que se alimenta de algas y los machos tienen la capacidad de nadar. Las hembras y las crías se alimentan cuando sube la marea: se quedan entre las rocas aguardando que llegue la comida. Estos son vulnerables al ataque de algunas aves como el gavilán.

Iguana marina de Galápagos

La iguana marina es endémica de las islas Galápagos y cuenta con un sistema especial para liberarse de la sal del agua a través de los orificios nasales. Tiene una coloración oscura que le permite, por un lado camuflarse con las rocas, y por el otro absorber mejor el calor del sol cuando sale del agua fría.

3. Iguana rayada (Ctenosaura similis)

Esta iguana del género de los Ctenosaura conocida también como ‘garrobo’ vive en Centroamérica, concretamente en Panamá. Ha sido introducida por el hombre en algunas islas del Caribe y en Florida, Estados Unidos. Prefiere las zonas rocosas y arenosas.

Iguana rayada (Ctenosaura similis)

La iguana rayada es el lagarto más rápido de la tierra: alcanza una velocidad de 35 km/h. Los machos miden 130 centímetros y son un poco más grandes que las hembras. Los jóvenes son insectívoros y, a medida que crecen, se convierten en herbívoros; se alimentan de flores, hojas, tallos y frutos.

4. Iguana del desierto (Dipsosaurus dorsalis)

Esta es otra de las especies de iguanas que podemos encontrar en el continente americano. En este caso, habita entre el suroeste de Estados Unidos y el noroeste de México. Elige, además del desierto, regiones secas, rocosas y a menos de 1 000 metros de altura. Soporta las altas temperaturas y crea su madriguera con montículos de arena.

Iguana del desierto: características

La iguana del desierto mide unos 60 centímetros y es de color beige o gris pálido, con manchas oscuras en todo el dorso y vientre más claro. Durante la época de apareamiento, los laterales del cuerpo se vuelven rosados en ambos sexos. Se reproducen en primavera y la hembra pone como máximo ocho huevos.

Se trata de un animal herbívoro que se alimenta de hojas, brotes y frutos. También se siente ‘atraído’ por las flores de color amarillo. Los principales depredadores de esta iguana son las aves de presa, las comadrejas, los zorros y las serpientes.

5. Iguana crestada de Fiji (Brachylophus vitiensis)

Es una de las pocas especies de iguanas que no viven en América. Lamentablemente, se encuentra en peligro crítico de extinción debido a la pérdida del hábitat natural por causa de la actividad agrícola, la introducción de plantas exóticas invasoras y los incendios forestales.

Iguana crestada de Fiji en peligro de extinción

La iguana crestada de Fiji es de color verde claro con fondo negro o gris y presenta bandas blancas en el cuerpo y cola. Mide unos 70 centímetros y los machos son más oscuros que las hembras. Al igual que las demás, es herbívora, así que se alimenta de flores, frutos, hojas y brotes.

El cortejo comienza en enero, se reproducen desde febrero a abril y la hembra incuba los huevos –entre dos y cuatro por temporada– durante nueve meses. Las crías nacen recién en octubre, durante la época de lluvias.

6. Iguana del caribe (Iguana delicatissima)

Es una hermosa especie arbórea que tiene gran similitud con la iguana verde, con la diferencia de que su coloración cambia según su ubicación. Se distribuye en los bosques, los manglares y las selvas de las Antillas menores. Es difícil mantenerlas en cautiverio y reproducirlas, pues la mayoría de sus huevos resultan infértiles.

7. Iguana bandeada de Fiji (Brachylophus fasciatus)

Es endémica de las islas Lau que se ubican al este del archipiélago de Fiji. Luce una coloración verde pálido que presenta varias bandas blancas transversales a lo largo de su cuerpo. De hecho, el gobierno de Fiji la considera tesoro nacional y su imagen se utiliza como símbolo en libros, monedas y hasta postales.

8. Iguana terrestre rosa de las Galápagos (Conolophus marthae)

La iguana terrestre rosa de las galápagos es endémica de la isla Isabela y se estima que quedan menos de 200 ejemplares. Por esta razón, la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza la clasifica como una especie en peligro crítico de extinción. De manera afortunada, su hábitat se ubica en una zona volcánica de difícil acceso, por lo que el hombre no puede afectarla, pero tampoco ayudarla.

9. Iguana cornuda (Cyclura cornuta)

Esta especie se caracteriza por poseer tres cuernos en la parte superior del hocico, por los cuales recibe su nombre. Presenta una coloración combinada de tonos grises, verdes y marrones, además de una cola aplanada que emplea como si fuera un látigo. Vive en la isla La Española que se encuentra en el mar Caribe.

10. Iguana mexicana de cola espinosa (Ctenosaura pectinata)

Como su nombre lo indica, esta iguana habita el centro y el oeste de México, en las zonas selváticas que se ubican cerca de las cosas. Mide poco más de un metro de longitud y tiene un peso de casi 9 kilogramos en promedio. De hecho, su tamaño influyó en que las culturas antiguas de la zona la usaran como alimento (costumbre que aún se mantiene).

11. Iguana de Utila (Ctenosaura bakeri)

La iguana de utila recibe su nombre por la provincia de la que es endémica -Utila, Honduras-. Su hábitat se compone de manglares y posee una coloración que cambia de tonos oscuros a azules conforme crece. Le encanta posarse encima de los árboles, pues así puede esperar pacientemente a sus presas sin gastar energía.

¿Iguanas como mascotas?

Como se mencionaba más arriba, algunas iguanas son utilizadas como mascotas por los amantes de reptiles. Sin embargo, esta práctica es complicada por el gran tamaño que alcanzan cuando maduran. Aunque mientras son pequeñas podrían parecer un reptil amigable e idóneo para el hogar, ciertas especies alcanzan tamaños que sobrepasan las expectativas de sus tutores.



En consecuencia, los ejemplares suelen ser liberados a la naturaleza y se ocasionan diversos problemas ecológicos. Es por ello que varios países controlan muy de cerca la adquisición de estos animales, lo que impide que sea fácil tenerlos como mascotas.

Si tienes el compromiso y los recursos para ofrecerle la calidad de vida que necesitan estos reptiles, asegúrate de adoptarlos en centros autorizados para su crianza. También, pide al vendedor los comprobantes legales de su tenencia, pues de lo contrario, podrías cometer un delito y contribuir a la captura ilegal de especies. Recuerda: no todos los animales son adecuados como mascotas.


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