Cáncer de piel en felinos: causas y tratamiento

El cáncer de piel en gatos afecta a las zonas más desprotegidas de la piel como las orejas, los párpados, nariz y boca

Escrito y verificado por la bióloga Silvia Conde.

Última actualización: 20 enero, 2020

El cáncer es una proliferación anormal de células que pueden llegar a invadir toda clase de tejidos y órganos como la piel. El carcinoma de células escamosas es la presentación de cáncer de piel más común en felinos.

Normalmente, aparece en las orejas, nariz, labios y párpados, zonas de piel menos protegidas, aunque también son frecuentes los tumores en el interior de la boca. Es más frecuente en gatos senior, se relaciona con la exposición solar y se asocia con los gatos de color blanco.

Causas del cáncer en gatos

En la gran mayoría de casos de cáncer no se conoce la causa exacta que lo provoca. Sí que hay factores que pueden influir en la aparición de un cáncer:

• Genética. Hay razas de gatos con mayor predisposición genética a padecer un cáncer que otros y a nivel individual ocurre lo mismo.
• Alimentación. La alimentación es un factor muy influyente en la salud de los animales. Ciertos alimentos previenen el cáncer por sus propiedades físicoquímicas; el exceso de otros alimentos, sin embargo, se asocia a otros tipos de cáncer.
• Factores ambientales. Contaminación, humo de tabaco, exposición solar… El cáncer de piel en gatos está asociado a una exposición continuada al sol. Al igual que nosotros los humanos, un exceso de exposición solar puede causar lesiones y cáncer de piel, sobre todo en las zonas más desprotegidas.

¿Cómo se detecta el cáncer de piel en felinos?

El carcinoma de células escamosas en gatos aparece como lesiones rosadas, zonas alopécicas y costras en la piel que, al principio, pueden confundirse con heridas. A medida que la enfermedad se agrava, la piel adquiere un aspecto más rojizo y pueden aparecer zonas ulceradas con los bordes más duros, como costras.

Las orejas, nariz, labios y boca son las zonas más afectadas. Aunque el tumor se extiende locamente destruyendo el tejido de alrededor, puede llegar a invadir otras zonas del cuerpo como el interior de la cavidad oral, los ganglios y los pulmones.

Como siempre, un diagnóstico temprano es clave para tratar la enfermedad; si ves estas lesiones, acude al veterinario para que confirme o descarte el diagnóstico. Una exploración y una biopsia –muestra de tejido– de las zonas más afectadas son necesarias para confirmar el cáncer.

La radiografía más avanzada y precisa, así como la tomografía computerizada, son herramientas de diagnóstico que buscan las masas cancerígenas y su evolución, muy útiles cuando estas masas se encuentran en el interior de la cavidad oral, algo que ocurre con frecuencia en este tipo de cáncer.

Tratamientos del cáncer de piel en felinos

El éxito del tratamiento depende de la gravedad de la enfermedad. Si las lesiones son muy leves, pueden tratarse, e incluso prevenirse, evitando la exposición en las horas de máxima radiación solar o aplicando un factor de protección en las zonas más vulnerables, aunque, tratándose de gatos, probablemente esta tarea no será fácil.

Si las lesiones son graves y se trata de un cáncer de células escamosas, existen varios tratamientos posibles:

• Extirpación quirúrgica del tumor. Cuanto antes se realice esta técnica, mejor, ya que evitará el avance del tumor a las zonas sanas de piel. Para ello, hay que eliminar todo el tejido canceroso y un margen de tejido sano alrededor para evitar recurrencias. Si solo están afectadas las orejas, como suele pasar en muchos casos, la extirpación puede ser la mejor solución.
• Radioterapia. La radioterapia puede combinarse con el método anterior para asegurar que eliminamos por completo el rastro del cáncer. Esta técnica suele ser más costosa y solo se encuentra en centros veterinarios especializados.
• Quimioterapia. El tratamiento con medicamentos disminuye las masas cancerígenas; el veterinario determinará la duración de este para que sea exitoso.