Cómo jugar con nuestros amigos felinos

Cómo jugar con nuestros amigos felinos

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 02 diciembre, 2017

Jugar con tu gato no solo es divertido, también mejora su salud física, ya que le proporciona un ejercicio valioso para los felinos de todas las edades, fortalece el vínculo mascota-humano y es un momento que no puedes dejar pasar si amas a tu pequeño compañero.

Si tienes gatitos

gatitos

Si en algún momento has tenido gatitos en casa, notarás que ellos jugan con cualquier cosa. Por eso, es importante que algunos elementos peligrosos como cuerdas, bolsas de plástico o pequeños objetos que puedan ingerir, queden fuera de su alcance, ya que les puede ocasionar graves daños a su salud.

Los gatitos si no lo supervisas pueden ser insaciables. Muchos propietarios seguramente te dirán, que el único que le puede seguir el ritmo a un gatito es otro gatito. Sin embargo, no cabe duda que te gustará jugar con él por medio de distintos juegos interactivos. Pero es muy importante que a medida que crezca, no piense que tus manos son un juguete.

La importancia del juego interactivo

gato jugando

Jugar con tu gato permite que el felino perfeccione sus habilidades de caza. Si observas en ese momento, tu gato buscará un objetivo enemigo, por lo que el enfoque seguramente será cauteloso, abalanzándose con convicción, saboreando la victoria.

Por otro lado, el juego ayuda a tu gato a mantener un peso saludable. Es una manera positiva para que tu amigo libere energía o agresión negativa. Además, fortalece el vínculo entre el dueño y su gato. Jugar también  ayuda a un gato tímido a ganar confianza. Y es un hecho, que una sesión de juego prolongada es una buena manera de facilitar la transición de tu gato, en un nuevo hogar. Y obviamente es muy divertido.

Para jugar con tu felino es muy importante que mantengas con fuerza el objeto con el que juegas.  En las tiendas para mascotas puedes encontrar gran variedad de juguetes como pueden ser varitas, pelotas con cascabeles o ratones de peluche. También es muy probable que tu pequeño minino se incline por aquellos objetos que tienes en tu casa como pueden ser anillos, papeles, envases de plástico, tapas de refrescos, entre muchos otros.

Si el juguete de tu mascota suele estar siempre a su vista, seguramente esa situación le resulte aburrida. Por lo tanto, es importante que los juguetes estén a su alcance a la hora del recreo. Para jugar con tu felino, tienes que tener en cuenta  que el juguete es una pequeña criatura asustada que huye del gatito feroz; se esconde en la esquina, se agacha debajo de la alfombra, se congela… No te excedas, los movimientos que hagas deben ser sutiles y eficaces.

Varía la velocidad y dirección del juguete. Una buena idea para llamar su atención es armar cajas y túneles para que el objeto cumpla la función de un ratón, esta situación será mucho más atractiva para tu gato, ya que hará todo lo posible para alcanzar su presa.

Durante el juego deja que tu gato fije el ritmo. No se puede obligar a un gato a jugar. Pero puedes probar diferentes enfoques para ver qué es lo que le genera interés. Tus intentos creativos dependerán para divertirlo. Para lograrlo, quizás puedes tratar de apagar las luces, ya que a los gatos les gusta cazar cuando hay oscuridad. Compara la intensidad de la acción a los intereses de tu gato. Después de un tiempo, llegarás a conocer el estilo de juego de tu felino y seguramente su mirada te dirá que está listo para jugar.

Recuerda que lo debes dejar ganar. Pero no lo hagas demasiado fácil. Deja que tu gato disfrute de algunos minutos de la persecución y cuando llegue el gran momento, déjalo anotar un golpe directo, de manera que pueda saborear la gran emoción de la victoria.

Jugar  con tu minino fortalece la relación y alivia el estrés. Tu gato disfrutará de sesiones de juego regulares contigo, ya que de esa forma sus juguetes cobran vida. En un hogar en donde existen varios gatos, una sesión de juego vigorizante con los humanos, puede ayudar a los felinos a que se lleven bien entre ellos. Finalmente, se recomienda que tu gato reciba diariamente dos sesiones de juego al día, de unos 15 minutos cada una de ellas.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.