Conoce al sabueso de Transilvania

Aunque tuvo se época de máximo esplendor durante el medievo como raza ligada a la nobleza, a principios del siglo XX estuvo a punto de desaparecer; a día de hoy se encuentra, sobre todo, en Hungría y Rumanía
Conoce al sabueso de Transilvania

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 18 agosto, 2018

Te presentamos un perro de caza, especialista en localizar una presa o seguir su rastro. Es un animal con mucho temperamento y gran sentido de la orientación, capaz de soportar condiciones climáticas extremas y recorrer grandes distancias. Sin embargo, el sabueso de Transilvania también puede y merece ser una mascota.

Un perro con mucha historia

Se estima que los antepasados de estos canes llegaron a lo que es hoy territorio húngaro y rumano junto con las tribus magiares en el siglo IX. La raza tuvo su apogeo en la época medieval. Era la predilecta de los nobles.

Por ese entonces, el sabueso de Transilvania presentaba dos variedades. La grande era utilizada para la caza mayor (búfalos, osos, lobos, jabalíes, linces). Por su parte, la variedad pequeña se empleaba para la caza menor (zorros, conejos, gamuzas).

A comienzos del siglo pasado, el también llamado sabueso húngaro estaba casi extinguido. Su cría se retomó hace unos 50 años. Hoy se encuentra, principalmente, en Rumania y Hungría.

Conoce al sabueso de Transilvania o sabueso húngaro, un perro de caza que se adapta a las circunstancias más adversas, pero que también puede ser una excelente mascota.

Sabueso de Transilvania: carácter

Características físicas de la raza

Con miembros musculosos, cuerpo rectangular y un tamaño medio, este can cumple con las características de un típico sabueso de la Europa central. Te contamos algunos detalles de su aspecto físico:

  • Altura a la cruz: entre 55 y 65 centímetros.
  • Peso: no menos de 25 kilogramos.
  • Cabeza: alargada pero no puntiaguda.
  • Mandíbulas: con maxilares fuertes y mordida en tijera.
  • Ojos: de color marrón oscuro, tamaño mediano, forma almendrada y corte algo oblicuo.
  • Orejas: colgantes, se insertan a mediana altura y se afinan hacia las puntas, que son redondeadas.
  • Cuello: musculado y con ligeras arrugas en la cara inferior.
  • Cola: fuerte y de inserción media
  • Pelo: corto, tupido, brillante y liso.
  • Color: negro, con marcas de color fuego sobre las arcadas orbitarias, el hocico y las patas. También puede presentar manchas blancas, por ejemplo, en la nariz, cuello, pecho y en la punta de la cola.

Carácter del sabueso húngaro

El sabueso de Transilvania es un perro de buen carácter, valiente, perseverante y equilibrado, pero también se muestra algo desconfiado e introspectivo. Además de ser un can utilizado para la caza, por sus características también es un excelente perro guardián.

Como es leal y amistoso, también puede resultar un gran animal de compañía, ya que sabe manejarse muy bien con las personas y con otros canes. Además, se muestra muy protector con su familia humana, con la que le gusta estar en permanente contacto.

Sabueso de Transilvania: carácter

Es un perro inteligente, lo que posibilita que se le puede educar sin grandes problemas. Y aunque se adapta a distintas circunstancias, es conveniente que, si no vive en el campo, habite casas con patios, terrazas o jardines.

Cómo cuidar al sabueso de Transilvania

Con una esperanza de vida de alrededor de 14 años, el sabueso húngaro no suele presentar grandes problemas de salud. Sin embargo, pueden darse casos de displasia de cadera y codo. Es aconsejable, por su parte, higienizar periódicamente sus orejas caídas, dado que pueden acumular bacterias u hongos.

Si bien es un perro fuerte y rústico, que no requiere de cuidados especiales, se impone, al igual que con todo can, visitas de control al veterinario. Además, no se debe descuidar la actividad física diaria para que se mantenga en forma y un cepillado semanal para eliminar los pelos muertos.

En el caso de que el can sea utilizado para la caza, tras terminar la jornada se impone una revisión física. Se recomienda inspeccionar, sobre todo, patas y orejas, para descartar que el animal no presente heridas, garrapatas o algún otro parásito.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.