Cuatro razones para esterilizar a tu mascota
Esterilizar a tu mascota es una gran decisión que solo tú podrás tomar. Esta importante elección, si aceptas dar el paso para ello, le traerá grandes beneficios a tu compañero, más allá de cambios de comportamiento e incluso en cuanto su salud en general.
¿Qué es la esterilización?
La esterilización es un procedimiento veterinario de poca atención de hospitalización, el cual consiste en la remoción o neutralización de los órganos reproductores de los animales. Es muy común que este se realice solo en gatos y perros, aunque se ha hecho en otras especies.
El procedimiento es sencillo, con dos formas: una más invasiva y otra de forma química. Esta operación suele tener un coste muy accesible y, a lo largo del mundo, se realizan jornadas para realizarla de manera responsable.
La intención del procedimiento es evitar que los animales entren en su ciclo reproductivo y poder controlar la población de una especie. Con la esterilización también se busca prevenir una serie de enfermedades asociadas con la reproducción animal.
Además, la esterilización produce cambios beneficiosos al comportamiento de la mascota. A continuación, te informamos acerca de los beneficios que el procedimiento trae consigo.
Beneficios de esterilizar a tu mascota
Desde cambios fisiológicos hasta temperamentales, en el siguiente apartado hablaremos un poco acerca de los distintos beneficios que trae el esterilizar a tu mascota.
Cambios hormonales = cambios de comportamiento
En los machos, al remover los testículos, se produce un cambio de temperamento bastante considerable. La mayoría de los machos perrunos son muy territoriales y hasta temperamentales debido a la concentración de testosterona que presenta su cuerpo.
Al no tenerlos, el animal se comportará con más tranquilidad y sumisión en contraste con los individuos que sí tienen sus órganos. Tampoco responderá con la urgencia de dejar el hogar para aparearse con una hembra, lo cual puede llegar a ser muy problemático.
En general, el animal estará más calmado y cómodo en casa. Si bien querrá pasear para saciar su energía, no lo verás suplicando por salir, dado que el encierro los puede atormentar.
En las hembras, al no tener sus ovarios se interrumpe el ciclo reproductivo, por lo que se detiene el proceso del celo y de la menstruación. Al detenerse el ciclo también disminuyen sus necesidades de salir del hogar en busca de pareja.
Se mostrará más tranquila y quizás decaída durante los primeros días, una actitud completamente normal al estar adaptándose a los cambios que suceden en ella. Con el tiempo se le notará más amigable y juguetona, incluso con los extraños.
Además, al no tener su celo evitará que cree problemas con los machos de la zona, los cuales querrán aparearse con ella y lograrán lo imposible para ello.
Previene graves enfermedades
Es un mito que haya que dejar que el animal llegue al primer celo para realizar la esterilización. De no hacerlo, se corre el riesgo que aumenten las posibilidades de padecer cáncer en las mamas y de cuello uterino; tiene un gran índice de mortalidad tanto en perros como en gatos.
En los machos evita la transmisión de enfermedades entre los miembros del mismo género, un aspecto importante si conviven con varios animales de la misma especie. Un ejemplo es el virus de inmunodeficiencia en gatos, el cual trae un alto índice de mortalidad.
Adicionalmente, esterilizar a tu mascota evitará la creación a futuro de tumores y quistes en zonas complicadas para las mascotas; los más recurrentes suelen estar ubicados en el ano y en el escroto.
Mejora la expectativa de vida
Es un hecho científico que los animales esterilizados tienen una calidad de vida más plena en contraste con los individuos no esterilizados. Si te preocupa no tener a tu mascota por mucho tiempo, esterilizarle es una forma saludable de extender la vida de tu compañero.
Las razones radican principalmente en la no aparición de las enfermedades antes mencionadas. Además, el metabolismo del animal se ralentiza un poco, lo que le permite extender su expectativa de vida. En otras palabras, el animal gozará de una salud excepcional en contraste con sus pares que no se han sometido a este procedimiento.
Evita la sobrepoblación
La mayoría de los dueños que deciden cruzar a sus animales buscan lo mejor para las crías resultantes de la unión, lo cual está muy bien. El problema es que no siempre se logra este cometido de forma satisfactoria.
Muchos de los cachorros terminan siendo regalados a hogares en los que se le podrá mantener en un principio, pero a la larga tendrán que abandonar al animal. Las razones para hacerlo suelen ser por problemas económicos y de espacio para mantener al animal con comodidad; las vacaciones son otros de los motivos.
Otro problema recae también en los hogares inestables, en los que se les maltrata o se les fuerza para una procreación forzosa, también llamadas granjas de animales. Aunque este último no es siempre el caso, cabe destacar.