El refuerzo positivo: enseña a tu perro y hazle feliz

El refuerzo positivo: enseña a tu perro y hazle feliz

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 02 diciembre, 2017

¿Tú qué prefieres: el elogio o la reprimenda? Por lo general, nadie quiere ser castigado.

¿Por qué habrían de preferir esta opción las mascotas? Por eso, a la hora del entrenamiento, por fin se está dejando atrás la opción del castigo para dar paso al llamado “Refuerzo Positivo”.

Este método consiste en premiar al perro con algo de su agrado cuando realice la acción que se le está solicitando y parte de la idea de que, de esta forma, es mucho más probable que el animal repita ese comportamiento en un futuro.

El refuerzo positivo como método de entrenamiento

Autor: ricardorp
Autor: ricardorp

Esta forma de entrenamiento es parte del condicionamiento operante que desarrolló el psicólogo Burrhus Frederic Skinner.

Se trata de un tipo de aprendizaje asociativo que tiene que ver con el desarrollo de nuevas conductas en función de sus consecuencias, y no con la asociación entre estímulos y conductas como ocurre en el condicionamiento clásico.

Mediante el condicionamiento operante, el sujeto tiene más probabilidades de repetir las formas de conducta que conllevan consecuencias positivas y, por el contrario, menos probabilidades de repetir las que conllevan consecuencias negativas.

Tomando esto como base, podemos señalar que la clave del refuerzo positivo está en que el perro aprende a pensar y no a obedecer por temor a ser castigado.

Por eso debe utilizarse en el momento oportuno. Debes premiar a tu perro inmediatamente después de la acción que quieras recompensar. Si tardas demasiado, es posible que tu can no asocie premio con acción.

Por ejemplo, si estás trabajando con la orden “Sentado” y lo premias cuando ya se levantó, no le quedará claro a tu mascota el motivo de la recompensa que le estás otorgando.

Si el animal no cumple correctamente la orden impartida, o tiene un mal comportamiento, la mejor opción es ignorarlo. Recuerda que, además, de nada servirá una reprimenda si no encuentras al animal “in fraganti”.

La constancia también es un tema esencial. Seguramente deberás repetir varias veces una acción hasta que tu perro la termine asociando con la obtención de un premio. Por eso, también debes aplicar la paciencia como regla.

Además, debes mantener la coherencia, al igual que todos los integrantes de la familia. Las órdenes para el animal deben ser siempre las mismas.

Entre las opciones que puedes emplear para recompensar a tu mascota, y que se sienta estimulada, puedes incluir:

Si bien las golosinas parecen ser las herramientas más eficaces, siempre deben ir acompañadas de un elogio, una caricia o una palabra de afecto. En todo caso, debes experimentar hasta encontrar las opciones más efectivas para tu mascota.

Ten en cuenta que, cuando tu perro está aprendiendo un comportamiento nuevo, el refuerzo debe ser continuo. Debes premiarlo cada vez que haga lo que le pides.

Cuando haya aprendido, tienes que comenzar a usar el “refuerzo intermitente”. Al principio lo premiarás tres de las cuatro veces que realiza el comportamiento y luego irás disminuyendo paulatinamente la frecuencia hasta que solo lo hagas de vez en cuando.

Eso sí, puedes seguir elogiándolo todo el tiempo. De esta manera, el animal aprenderá que, si sigue respondiendo a tus órdenes, en algún momento obtendrá lo que quiere.

Ventajas del refuerzo positivo

perro comiendo

Las principales razones para optar por esta forma de entrenamiento se pueden resumir de la siguiente forma:

  • Es simple. Tiene reglas básicas y que son fáciles de comprender.
  • El perro no sufre. No se usan castigos de ningún tipo. En realidad, el castigo para el mal comportamiento es ignorarlo.
  • Pueden participar todos los miembros de la familia en el entrenamiento. Eso sí, recuerda que no se le deben cambiar las reglas de juego al animal, para evitarle confusiones mayúsculas. Coherencia ante todo. Y en todos.
  • Es muy divertido. El entrenamiento se convertirá en algo placentero y disfrutable tanto para ti como para tu mascota.

Es un hecho comprobado que cualquier conducta que se recompensa tiende a repetirse. Y que las que ignoramos, desaparecen.

Por eso, con el refuerzo positivo lograrás que tu mascota aprenda más rápido y con más ganas.

Elige adiestrar a tu perro haciéndolo feliz con los premios que consigue. Además, para tu can siempre será una recompensa extra saber que te está complaciendo con sus actitudes.

Imagen destacada cortesía de Jose Ramón Torre López.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.