¿Con qué frecuencia debe comer tu perro?

¿Con qué frecuencia debe comer tu perro?

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 15 noviembre, 2017

Más allá del tipo de alimento que prefieras darle, y de la cantidad y la calidad adecuada, un tema importante a definir es con qué frecuencia debe comer tu perro. Sobre esta materia existen distintas opiniones, pero, para que el animal se mantenga activo y no engorde, parece imponerse la que indica alimentar a nuestra mascota entre 2 y 3 veces por día.

¿Es correcto que los canes coman una vez al día?

Tiempo atrás estuvo muy en boga la idea de que a los perros había que alimentarles solo una vez al día. Incluso en la actualidad, algunos veterinarios siguen aconsejando esta forma.

Pero a ciencia cierta, la justificación de esta afirmación no resulta del todo clara. Parece provenir de la idea de que los canes tienen adaptado su metabolismo para este tipo de frecuencia alimentaria debido a su herencia genética lobuna.

Los lobos dependen de lo que logren cazar para alimentarse. Y después de una buena comida, si la caza resultó satisfactoria, pueden venir períodos de más frugalidad.

Evítale problemas digestivos a tu perro

comida especial para cachorros

Sin embargo, se ha comprobado que si alimentamos a un can cada 24 horas, lo más probable es que comience a sufrir de gastritis.

El motivo: el animal tiene mucha hambre y su ansiedad por comer le hace devorar los alimentos.

Esta forma de “aspirar” la comida, a la larga, le provocará inflamación a causa del aire que tragó al ingerirla y las digestiones se volverán más dificultosas.

Alimentar a nuestro perro entre dos y tres veces por día parece la opción ideal para que se mantenga sano y fuerte.

Detalles sobre con qué frecuencia debe comer tu perro

Entonces, lo ideal es que, una vez establecida la cantidad de comida que debe ingerir tu peludo a diario, la dividas por las veces en que le proporcionarás el alimento.

Si le das pienso, o alimento húmedo en latas, puedes tomar como referencia la tabla indicativa que figura en los envases.

En cambio, si le cocinas a tu perro, deberás ser muy preciso para darle una dieta equilibrada.

De todas formas, es mejor que este cálculo lo realice el veterinario y, además, lo vayas ajustando de manera periódica.

Las principales variables a tener en cuenta para este tema son:

  • Edad
  • Raza
  • Tamaño
  • Condiciones de salud
  • Consumo de energía según la actividad diaria del animal

A cada edad, su frecuencia alimentaria

La edad es un parámetro importante en el tema de la frecuencia con que debe comer un can. Sus necesidades nutricionales varían a medida que va creciendo. Por ejemplo:

  • Los cachorros de entre 2 y 3 meses deben ser alimentados un mínimo de 4 veces al día.
  • Entre los 4 y los 6 meses, la cantidad puede reducirse a 3.
  • De allí en adelante, la idea es darle su ración repartida entre 2 ó 3 veces.

Otros temas a tener en cuenta a la hora de alimentar a tu perro

Autor: Fernando Dall'Acqua
Autor: Fernando Dall’Acqua

Además, es importante que establezcas horarios fijos para sus comidas y que trates de mantenerlos en la medida de tus posibilidades.

Este detalle también contribuirá a que tu peludo haga sus necesidades más o menos a la misma hora cada día. Sería perfecto que hicieras coincidir esta actividad con los momentos dedicados a pasear con tu mascota. Eso sí, no olvides llevar los elementos necesarios para recoger los excrementos de tu can.

También considera mantener siempre el mismo lugar para que tu peludo coma. Y asegúrate de que los cuencos sean adecuados en cuanto a tamaño y material.

Consulta a distintos profesionales

Entonces, no te quedes con una sola opinión. Consulta a distintos especialistas y establece con certeza la cantidad, calidad y frecuencia con que debes alimentar a tu peludo.

Recuerda que cada perro es único y, si bien en cuestiones de alimentación también pueden establecerse algunas reglas generales, la mejor forma de que tu perro tenga una dieta equilibrada es personalizándola.

De esta forma, tu peludo estará siempre sano y feliz, con muchas ganas de jugar y con su pelaje brillando a más no poder.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.