Qué hago si mi perro se atora

Qué hago si mi perro se atora

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 16 noviembre, 2017

Todo parece estar tranquilo con tu mascota hasta que de repente empieza a toser con fuerza y  a respirar con dificultad mientras intenta expulsar sin éxito algo que parece estar atravesado en su garganta. No pierdas la calma. Te contamos cómo proceder si tu perro se atora.

Qué hacer cuando un perro se atora

El atragantamiento se da por algún objeto que el animal tragó pero que quedó atascado en su tráquea. Puede tratarse de un hueso, un juguete o de infinidad de elementos que el peludo se llevó a la boca.

Ante esta situación, es natural que el can se ponga nervioso, complicando aún más el cuadro. Por eso lo primero que debes hacer es tranquilizarlo con palabras y caricias. Es que cuanto más se altere el peludo, más fuerte respirará y provocará que el objeto que se tragó se introduzca aún más en su aparato respiratorio. Además:

  • Llama a un veterinario que atienda emergencias para que te de instrucciones de cómo manejarte. Así podrá indicarte si puedes llevar al animalito al consultorio o deberás proceder tú para salvarle la vida, según la urgencia del caso.
  • Pide ayuda a otra persona, para que colabore con las distintas maniobras que deberás realizar con el perro.

Cuando un perro se atora, no pierdas la calma. Llama a una urgencia veterinaria y sigue al pie de la letra las instrucciones que te vayan indicando.

Cómo maniobrar para que tu can expulse el objeto que lo atraganta

Cuando el perro se atora, entonces, es muy probable que tengas que actuar tú, en lo posible, siguiendo instrucciones telefónicas de un profesional.

Seguramente deberás realizar una acción similar a la maniobra de Heimlich, adaptada a animales, para intentar que tu mascota abra su aparato respiratorio. ¿Cómo lograrlo? Levantando las patas traseras del perro para favorecer la salida del elemento que lo está asfixiando.

Entonces, levanta las patas de atrás de tu can y sostenlas con tus piernas. Utiliza también los brazos para sujetarlo. La idea es que el tercio trasero del animal quede levantado, aunque no es necesario que alcance la posición vertical.

Esta acción debería ser suficiente para que el perro logre expulsar el objeto que lo atraganta.

Otros temas a tener en cuenta cuando el peludo está atorado

Solo si tienes experiencia en primeros auxilios para animales puedes intentar aplicar una presión seca en el final de la caja torácica del can para favorecer que despida el elemento atravesado.

Pero si no estás seguro de cómo hacerlo, abstente, ya que la acción no solo puede resultar ineficaz, sino peligrosa. Por ejemplo: si la presión le provoca el vómito, se pueden llegar a bloquear aún más las vías respiratorias del perro.

Además, salvo que el elemento que está atorando a tu peludo esté muy visible, no metas la mano en su boca para intentar quitarlo. Si lo haces:

  • Lo pondrás más nervioso.
  • Bloquearás aún más la entrada de aire.
  • Corres el riesgo de que te muerda, ya que se encuentra alterado y dolorido por la situación que atraviesa.
  • Puedes provocar que el objeto se introduzca aún más profundamente en su aparato respiratorio

Cómo prevenir que tu perro se atragante

Si gracias a tu ayuda tu amigo de cuatro patas supera el atragantamiento, debes llevarlo de todas formas al veterinario para que lo controle y verifique si queda algún resto del objeto en la tráquea que deba ser quitado.

Pasado el susto, toma medidas para que tu mascota no se vuelva a atorar. Es que debes tener mucho cuidado con los elementos que dejas al alcance de tu perro. Ten en cuenta que por curiosidad puede llevárselos a la boca y terminar al borde de la asfixia. Entonces:

  • Explícale a tus hijos que no tienen que dejar juguetes pequeños o que se rompan fácilmente al alcance del amigo de cuatro patas.
  • Utiliza cestos de basura que el can no pueda destapar y extraer así objetos peligrosos.
  • Si  dejas solo a tu peludo, procura que sea en sitios donde no cuente con elementos que pueda romper con facilidad (tapizados, ropas, calzados, etc.).

Teniendo en cuenta estos detalles, seguramente tu perro correrá menos riesgos de sufrir una asfixia por atragantamiento.

 

 


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.