Holsteiner, la elegancia personificada en un caballo

Holsteiner, la elegancia personificada en un caballo

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 28 noviembre, 2017

Los caballos son animales inteligentes, cariñosos y, sobre todo, elegantes y majestuosos. El Holsteiner reúne todas estas cualidades y más. Hoy te queremos hablar de él por su belleza, elegancia y su historia. ¿Te gustaría conocerlo? Pues quédate con nosotros.

Esta raza de caballo tiene un historial larguísimo en exposiciones, doma, saltos y concursos. Por ello, merece que lo conozcamos más a fondo.

Todo lo que tienes que saber sobre el Holsteiner

Origen

Esta raza de caballo tiene su origen en Schleswig-Holstein, en el norte de Alemania. Es una de las razas más antiguas conocida, exactamente de 1225. El monasterio de Uetersen recibió el derecho a criar caballos y de ahí parte la historia del Holsteiner.

No obstante, no fue hasta 1460 cuando se reconoció por primera vez la raza.

Caballo holstainer en una exhibicion
Fuente: Alexander Kastler

Fueron usados para montura, enganche y labores agrícolas, pues los criadores mezclaban con otras razas a su antojo, creyendo que de ese modo se podría conseguir el caballo que necesitaran en cada momento dependiendo de la labor.

Por ejemplo, caballos con sangre española y napolitana se mezclaron con el Holsteiner creando un animal fuerte y recio para la guerra. Más tarde, se quiso aligerar su composición y peso debido a que había gran demanda de ellos para el uso agrícola, y lo hicieron con pura sangres ingleses. Hoy día estas mezclas han cesado.

Características de la raza

Siguiendo las pautas de la Federación de Criadores de Caballos Holsteiner, el Holsteiner debe tener apariencia atlética, dotes para el deporte y elegancia y cualidades para la doma y la exhibición.

Debe tener un buen carácter y presentarse equilibrado, estando siempre activo y preparado para el trabajo.

Sus medidas son entres 163 y 173 centímetros de altura. Su cuello debe estar arqueado y siempre con forma recta y alzada, con cabeza pequeña, ojos grandes y expresivos. Será fácilmente reconocible por la marca a fuego de una “h” en mayúscula encerrada en un escudo y con una corona sobre este.

Sus colores admitidos son el negro, castaño y castaño oscuro. Pueden tener algunas marcas, pero no deben exceder el 15% del cuerpo, si no, serían rechazados como pura sangre.

Cuando se abandona el pago y se empieza a repechar, tira el caballo adelante y el alma tira pa´atrás.

-Frases de Atahualpa Yupanqui-

Habilidades especiales

El Holsteiner es un caballo usado para deportes ecuestres, así como domas y exhibiciones.

Saltos

El Holsteiner de la antigüedad era pesado, pues se “creó” para el uso agrícola, por lo que eran pesados y lentos, unas aptitudes no muy buenas para esta disciplina. Este problema se terminó con los cambios que se hicieron en la raza sobre los años 60, que aligeraron su peso y su complexión.

La aptitud para el salto es algo innato en este caballo.

Galope

Tanto para el galope como para la doma, la elegancia del Holsteiner salta a la vista. Es ligero al caminar, elegante, dinámico pero equilibrado a la vez, una elegancia única en un animal imponente y majestuoso.

Caballo holstainer saltando
Fuente: dregsplod

Carácter

El carácter de los caballos es conocido por todos. En el caso del Holsteiner destacan su equilibrio, calma, fiabilidad y valor. Sin embargo, hay quienes afirman que el duro entrenamiento al que se ha sometido a estos caballos para hacerlos grandes saltadores, ha hecho que la raza se agrie y sean ariscos y difíciles de montar.

Si esto es cierto o no, no lo sabemos. No obstante, los resultados deportivos obtenidos por la raza dejan ver que el esfuerzo y el entrenamiento bien han valido la pena.

Nos ha encantado ayudarte a conocer más de cerca a este maravilloso ejemplar que creemos que merece el reconocimiento como uno de esos caballos más hermosos de la historia ecuestre.

Fuente de las imágenes: Biso, Alexander Kastler y dregsplod


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.