La sordera de perros y gatos... ¿Qué podemos hacer?

La sordera de perros y gatos... ¿Qué podemos hacer?

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 02 diciembre, 2017

La sordera de perros y gatos suele ser habitual cuando alcanzan la vejez, aunque también puede deberse a un problema de nacimiento, o también, ser ocasionada por alguna infección. No cabe duda de que el dueño siente una gran satisfacción cuando el animal acude cuando se lo llama, pero de no ser así, habría que tener en cuenta este comportamiento.

Al principio probablemente se crea que se trata de una distracción del animal, el no presentarse cuando se le llama, pero si se hace constante, probablemente se trate de una sordera. Sin embargo, no hay que quedarse de brazos cruzados, dado que se puede solucionar con entrenamiento y un par de trucos o al menos hacer que su vida sea un poco más fácil. Eso sí, hay que tener paciencia en este período de aprendizaje que puede ser lento pero efectivo.

Perros y gatos propensos a la sordera

dalmata 3

Las razas de perros propensas a tener srodera son el Dálmata, el Bullterrier y el Terrier, mientras que los gatos blancos pueden tener predisposición a ser sordos y aún no se conoce el origen de esta anormalidad que se asocia al color, pero se cree que se debe a las estructuras nerviosas del oído y a la pigmentación.

¿Cómo hacerle frente a la sordera de perros y gatos?

La sordera suele ser un gran problema para los animales, porque es uno de los sentidos más importantes que tienen. Tal es así, que los gatos suelen perder el equilibrio físico y no pueden mantenerse estáticos en cornisas o sobre los árboles. Los perros o los gatos sordos son más vulnerables ante diversos peligros, como el tráfico, por ejemplo, por lo que es fundamental que siempre lleves a tu mascota con correa.

En ocasiones los animales no responden al llamado de su dueño, pero quizás no tenga todo el sentido auditivo perdido, por lo que es probable que ellos escuchen los sonidos agudos. Sin embargo, también podrás acudir a la opción de utilizar señales luminosas, como es encender y apagar una linterna, ya que por más que  tenga sordera, hay otros sentidos no afectados que hay que fomentar.

Un perro o un gato sordo mantienen el sentido del olfato y por ende hay que estimularlo por ahí, colocándole comida para que huela y puedas así comunicarte con él.

Lenguaje de los signos

gato con mujer

Los gatos o los perros suelen reaccionar ante movimientos con la mano en forma de llamada, como se les hace a las personas también. Por tal motivo, para que aprenda este lenguaje, tendrás que premiarlo cada vez que se acerque a ti. En caso de que se te dificulte aprender este tipo de lenguaje para animales sordos, podrás ir a alguna clase o consultar algún libro para que te puedas comunicar mejor con tu mascota.

Vibración

Los animales reconocen la vibración que hacen los seres humanos con las manos, de igual manera que si se dan firmes golpes en el suelo con los pies. Además, hay algunos collares que venden en las tiendas de mascotas que tienen la capacidad de vibrar y que no les causan al animal ninguna molestia.

Amigo de guía

Una mascota sorda puede tener a otra que no lo sea y le sirva de guía, es decir, que si tocaran el timbre, el animal no sordo saldrá corriendo hacia la puerta y el otro seguirá.

Mejor que curar es prevenir

Hay cuidados que pueden prevenir infecciones y enfermedades, que de no seguirlos al pie de la letra, podrían derivar en sordera. Un cuidado esencial es el de la limpieza de los oídos, que deberá hacerse una vez cada dos meses preferentemente. No obstante, si el animal siente picor en los oídos, lo mejor será ir a su veterinario.

Nunca está demás consultar sobre los productos que se encuentran disponibles para limpiarle los oídos al perro o al gato y la forma de hacerlo, porque de no hacerlo bien, la mascota podrá padecer una  infección.

Prueba para los gatos

Si tienes intriga por saber si tu gato te ignora porque es así o porque tiene sordera, puedes probar a acercarle una aspiradora a ver si sale corriendo por el miedo al ruido o si se queda jugando. También, puedes probar si el maullido es más fuerte que el que hacía antes, dado que un gato sordo no regula el volumen.

¿Qué opinas sobre este artículo de sordera de perros y gatos? ¿Has realizado ya alguna prueba?


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.