¿Sabías que los perros sudan a través de sus patas?

¿Sabías que los perros sudan a través de sus patas?
Francisco María García

Escrito y verificado por el abogado Francisco María García.

Última actualización: 28 noviembre, 2017

Los perros son animales extremadamente activos y enérgicos. Ellos no transpiran como los humanos a través de la piel sino a través de sus patas. Muchos afirman que los perros sudan a través de su lengua e incluso  a través de su nariz. Pero ¿qué hay de verdad en esta creencia?

A continuación te contaremos toda la verdad acerca de cómo transpiran los perros.

Para los humanos, la transpiración es la  principal  forma de cambiar energía con el ambiente, refrescar la temperatura corporal y eliminar toxinas del organismo. Eso es posible gracias a la composición de la piel. Los humanos contamos con glándulas sudoríparas para la fabricación del sudor y eliminación de toxinas a través de los poros de la epidermis. En el caso de los perros, la transpiración no se realiza a través de la piel, aunque efectivamente sí cuentan con glándulas sudoríparas.

Es importante aclarar que es un mito aquello de que los perros no transpiran. Al igual que nosotros, ellos también necesitan equilibrar la temperatura de su cuerpo, eliminar toxinas y trocar energía con el ambiente. Como no transpiran igual que un ser humano, surgen diversos mitos al respecto pero todos ellos son falsos.

¿Por qué los perros no sudan como los humanos?

Un ser humano saludable es capaz de regular fácilmente su temperatura corporal y refrigerar rápidamente su organismo. Eso se debe a la eficiencia con que las glándulas sudoríparas son activadas para liberar sudor. Estas glándulas que componen la estructura de la piel humana son especializadas en liberar vapor de agua por los poros.

La estructura de la piel de los perros es diferente que la de los humanos. Los perros no poseen glándulas sudoríparas y no pueden producir sudor ni eliminar vapor de agua por los poros de la epidermis.

Sin embargo, su sistema de refrigeración corporal más complejo y hasta cambia fluidos más constantemente con el ambiente que el de los seres humanos.

Los perros no poseen glándulas sudoríparas por todo su cuerpo justamente para garantizar la correcta refrigeración del organismo. Si un perro sudara por todo el cuerpo, esta sustancia combinada al exceso de pelos daría origen a una especie de capa grasosa. Con ello se impediría el cambio de fluidos con el ambiente y se dificultaría la disipación de calor.

Por eso los perros concentran el conjunto de glándulas que sí son capaces de eliminar vapor de agua y disipar calor. Y las tienen en sus patas, en su lengua y a través de la respiración de tipo jadeante.

Grasas en sus almohadillas

Las almohadillas poseen una gruesa capa de grasas que sirve para amortiguar los impactos y la presión de las pisadas. También para aislar térmicamente y para eliminar vapor de agua. Ahí se concentran las glándulas capaces de expulsar vapor de agua. Ese mecanismo es lo más parecido al sudor humano, aunque no sea exactamente igual.

Eso explica básicamente que en días calurosos las almohadillas de los perros suelen estar húmedas. Y por qué se debe evitar llevar el perro a pasear en superficies con temperaturas excesivamente elevadas, como el asfalto. Ello podría originar quemaduras, ralladuras y daños en las patas del animal.

Otra maniobra termorreguladora de los perros es la respiración jadeante. Las glándulas salivales eliminan vapor de agua y permiten la refrigeración del organismo.

El jadeo se combina con la capacidad de disipar calor de la lengua del perro. Así se completa un importante y eficiente mecanismo refrigerador de estos animales.

En caso de poseer un perro potencialmente peligroso y utilizar bozal en sus paseos y convivencia social, se debe optar por el bozal de tipo canasta o cesta. Este bozal no interfiere en la respiración jadeante del perro.

 ¿Entonces es cierto que los perros sudan por las patas?

La respuesta es sí y no. Depende de grado de exigencia que se le impone, físicamente hablando.

Como hemos visto, las almohadillas caninas sí poseen glándulas similares a las sudoríparas. Aunque no produzcan sudor precisamente igual al de los seres humanos. Esta acción combinada a la lengua y a la respiración jadeante, permite la refrigeración del cuerpo y el cambio de fluidos con el ambiente. Entonces, sí es cierto que el mecanismo más próximo de la transpiración para los perros ocurre a través de las patas.

Pero los perros no son capaces de producir sudor al igual que los humanos. Lo que hacen es eliminar vapor de agua a través de patas, lengua y respiración jadeante. Esos mecanismos desempeñan en el organismo de los perros lo que mayoritariamente las glándulas sudoríparas realizan en el cuerpo humano.

Independiente de las controversias sobre si los perros sudan a través de las patas o no, es importante cuidar bien de las almohadillas caninas. Estas desempeñan funciones esenciales para el equilibrio de su organismo. Por eso, un cuidado reforzado e hidratación abundante son necesarios en los días más calurosos del año.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.