Qué saber sobre los perros lazarillos

Lo primero que hay que conocer es que las razas más habituales para cumplir esta función son los labradores o golden retriever, así como el pastor alemán; ello se debe, entre otros motivos, a su carácter equilibrado, inteligencia y facilidad de aprendizaje
Qué saber sobre los perros lazarillos

Escrito por Yamila

Última actualización: 25 enero, 2018

Quizás hayas visto en la calle o en el metro a una persona invidente guiada por un can y te has preguntado cómo hacen los perros lazarillos para saber, por ejemplo, cuándo cruzar en una avenida o llevar al dueño hacia un lugar específico. En este artículo te responderemos a esa cuestión y además te contaremos todo sobre estos animales.

Qué son los perros lazarillos

También conocidos como guías o de asistencia, se trata de caninos adiestrados con el fin de dirigir en la calle a personas ciegas o con impedimentos visuales, así como también para ayudarles en las tareas hogareñas.

Los perros lazarillos cuentan con ciertos ‘privilegios’ o derechos en diferentes países, como por ejemplo poder viajar en un transporte público mientras cumplen su función o están de servicio.

Este animal debe tener la capacidad –para eso es entrenado– de identificar y anticipar aquellos peligros que puedan poner en riesgo la salud o la integridad física de su dueño.

Perro lazarillo

Las razas elegidas habitualmente para esta tarea son el golden retriever, el labrador y el pastor alemán: son equilibrados en cuanto a su temperamento, inteligentes y fáciles de adiestrar.

Los primeros perros lazarillos fueron cuatro y su trabajo el de guiar a veteranos que habían quedado ciegos durante la primera guerra mundial. Desde entonces, diferentes asociaciones se encargan de adiestrar a los animales y entregarlos a las personas que lo necesitan.

¿Cómo se entrena a los perros lazarillos?

Básicamente, la función de estos canes es ‘ser los ojos de quienes no ven’, y para ello deben entrenar arduamente durante casi dos años. Los perros lazarillos no son mascotas ‘normales’ sino que han sido adiestrados para cumplir una función.

El proceso comienza mucho antes del nacimiento del animal: en los centros de crianza se seleccionan cachorros de pura raza o pedigrí. Cuando tienen dos meses y ya no se alimentan con la leche de la madre, los vacunan debidamente y los entregan en casas de acogida, donde las familias voluntarias se encargan de cuidarles.

Perro lazarillo y un niño

En ese lapso de tiempo, los supervisores realizan visitas periódicas en los hogares y se aseguran de que el animal está siendo bien tratado y que cuenta con todo lo que necesita. La organización les provee la comida y los cuidados veterinarios, que incluye la esterilización del perro para evitar cambios en su comportamiento.

Al año cumplido ya tienen la capacidad para aprender sus tareas y comenzar con el adiestramiento: regresan a la fundación y deben acostumbrarse a compartir su vida con otros iguales a ellos. La familia de acogida puede consultar sobre la evolución de su antigua mascota, visitarle y conocer a quien servirá cuando termine su entrenamiento.

El proceso de adiestramiento es extenso –alrededor de dos años– y, si bien es duro, no representa un sufrimiento para el animal. En el caso de que un ejemplar sea muy sensible a los estímulos ambientales como ruidos, otros perros o personas, no será seleccionado como perro de asistencia.

Perro lazarillo y un niño
Fuente: Facebook de PerrosGuia Leones Quilmes O La Colonia

Los perros lazarillos deben ‘aprobar’ varios exámenes: cruzar la calle en línea recta, marcar puertas o escaleras, evitar obstáculos e identificar bordillos. La paciencia es fundamental para los instructores, ya que si bien las razas elegidas son fáciles de entrenar, siempre hay algunos que necesitan más tiempo que otros para aprender.

Cuando el entrenador determina que el perro está listo para comenzar su trabajo, el paso siguiente es encontrarle una persona adecuada. Entre la extensa lista de espera de no videntes aguardando por su guía se elige uno que sea acorde con el animal. ¿Qué se tiene en cuenta? La altura, el peso, la velocidad de paso, la iniciativa, las actividades, etc.

Si bien es cierto que los perros lazarillos son de gran ayuda para una persona ciega, lo cierto es que estos animales son privados de muchos estímulos y no tienen una vida plena como otras mascotas. Por lo tanto, se está trabajando en el desarrollo de perros robots para dejar de lado el uso de seres vivos.

Por último, unos consejos en caso de que veas un perro guía en la calle: no lo distraigas, no le ofrezcas comida, no lo toques –tampoco el arnés o correa– y solo háblale si el dueño lo permite.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.