Salvamento marítimo rescata a un perro en el mar

Ir a la playa es sinónimo de diversión, sobre todo si vamos acompañados de los compañeros caninos. Aún así, existen ciertos riesgos a tener en cuenta.

Escrito y verificado por la bióloga Elsa M. de Arribas.

Última actualización: 17 septiembre, 2020

Algunos titulares son tan asombrosos como este: «salvamento marítimo rescata a un perro en el mar». Al leerlo, pueden surgir diversas preguntas en la población general, pues no nos encontramos con noticias así todos los días.

A continuación, indagaremos un poco más sobre este suceso con un titular tan curioso. Asimismo, mencionaremos algunos consejos esenciales a la hora de llevar a los perros a la playa, para evitar percances como el que hoy nos atañe.

Salvamento marítimo rescata a un perro en el mar

En algunas ocasiones, los perros pueden dar algún que otro disgusto. Uno de los casos más reciente es el experimentado por el dueño de un perro en Gales, en agosto del año 2020.

Por lo que parece, el can se emocionó persiguiendo gaviotas y acabó a una milla y media de la playa. Para que nos entendamos, la distancia recorrida por el animal mar adentro fue de 2,41 kilómetros.

Los integrantes del equipo de salvamento marítimo suele responder a llamadas de auxilio llamativas, pero es probable que este curioso rescate no vayan a olvidarlo nunca en su vida.

La balsa de salvamento marítimo salió rápidamente a rescatar a este aventurero perro. Gracias a este equipo, el animal pudo reunirse con su agradecido dueño en la playa tras un susto de infarto.

Precauciones a seguir con un perro en la playa

Cómo hemos podido ver, un simple paseo por la playa puede acabar con el titular «salvamento marítimo rescata a un perro en el mar». Por ello, es necesario seguir una serie de precauciones a la hora de llevar a los perros a la playa. A continuación, te brindamos algunos consejos.

Buscar un sitio tranquilo y una zona de baño segura

Algo que el perro no podrá evitar será curiosear en el mar y, posiblemente, darse un chapuzón. Esto es normal, aunque conviene elegir una zona segura que no tenga corrientes y que no sea profunda.

Así, el animal podrá disfrutar del baño, algo que a su vez será una forma de combatir un golpe de calor.  Esto es debido a que al bañarse la temperatura corporal del animal se reduce.

Además de vigilar las corrientes y la profundidad, otro detalle importante es la bandera de peligro. Según el color que indique la bandera, el perro podrá o no bañarse, al igual que los seres humanos.

Estar pendientes del animal

Aunque al ir a la playa apetezca descansar y desconectar, el llevar a un animal exige responsabilidad. Es necesario estar pendiente de que el perro no sufra (ni cause) ningún daño o molestia.

Al ser un sitio público, es importante respetar a las otras personas que están en la playa. Además, al vigilarlo, se evita que pueda perderse en el mar persiguiendo gaviotas, como el perro de la noticia.

Protección frente al sol

Aunque parezca un poco extraño, la crema solar es necesaria para los perros. Se deben proteger las zonas con poco pelo y poca pigmentación, como puede ser la nariz.

Otro detalle que puede pasar desapercibido es el protector de las almohadillas. Al igual que nosotros brincamos al pisar la arena caliente, las patas del can son más sensibles ante superficies a altas temperaturas.

Por ello, un protector de almohadillas es muy útil, sobre todo si el perro va a menudo a la playa. No obstante, también se debe evitar acudir a ella en las horas centrales del día, ya que es cuando el sol es más fuerte.

Llevar comida y agua

Asimismo, no solo hay que proteger a los canes del sol poniéndoles crema, sino también con hidratación. Es esencial que el perro beba frecuentemente agua fresca y limpia, así que también se recomienda llevar un bebedero y comedero.

Esto es debido a que si consumen agua salada, pueden aparecer problemas gastrointestinales en los perros. Lo mismo ocurre si accidentalmente ingieren arena, por lo que debemos vigilarlos estrechamente.

Comprobar si la playa admite la entrada de animales

Normalmente, puede consultarse en la página de la ciudad si se permite la entrada de animales en la playa. Esto es debido a que algunas playas sí son aptas para su estancia y otras no.

Por ello, antes de acudir a una zona turística costera, primero hay que asegurarse de que la entrada de la mascota está permitida, ya que el tutor debe cumplir las obligaciones legales impuestas en la playa.

Para conocer esta información, se pueden acceder a las ordenanzas municipales. Por ejemplo, en el caso de Valencia (España), se prohíbe la presencia de los perros en las playas.

La única excepción que permiten son los perros de salvamento o de auxilio. También pueden entrar los perros lazarillos o de asistencia, pero el tutor tiene que llevar su documentación pertinente en todo momento.

No obstante, indican que el propio Ayuntamiento será el encargado de determinar la playa en la que pueden entrar. El dueño debe hacerse responsable de cualquier actuación de su mascota.

En definitiva, un día de playa puede convertirse en una pesadilla si no se tiene cuidado. Por ello, siempre que se lleva a un perro a la playa, hay que seguir algunas precauciones.

Además, el perro debe ir acompañado de su documentación en regla y estar correctamente identificado. De esta manera, tanto el dueño como el animal podrán disfrutar de un día de playa sin sobresaltos.