Tiburón cuerno: hábitat y características

A pesar de su nombre agresivo, este tipo de tiburón es de los más pequeños dentro de tu especie. ¡Conoce más sobre él!
Tiburón cuerno: hábitat y características

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 16 noviembre, 2018

En las profundidades del mar hay especies sin fin que nos sorprenden cada día. Con respecto a los tiburones por ejemplo, hay distintos ejemplares, y cada uno con características distintas. ¿Te gustaría conocer a algunos de ellos? Pues en esta ocasión vamos a hablarte sobre el tiburón cuerno.

Todo lo que hay que saber sobre el tiburón cuerno

Características

Su nombre científico es ‘Francisci’ y aunque su nombre quizá lleve a pensar en un animal grande con un enorme cuerno protuberante, lo cierto es que es el tiburón más pequeño de todos los que existen, además de ser muy especial por los colores que presenta.

Esta especie se reconoció en el año 1855 cuando se llevó a cabo la primera investigación sobre él a cargo de Charles Frederic Girard, la cual fue publicada en las “Actas de la Academia de Ciencias Naturales de Filadelfia”.

Tiene una cabeza pequeña pero ancha y su hocico es de forma redondeada. A diferencia de otros peces, el tiburón cuerno no tiene membrana en sus ojos. Su mandíbula es curvada y muy pequeña en la que se puede encontrar entre 19 y 26 filas de dientes en la zona superior y de 18 a 29 filas en la parte inferior.

Tiburón cuerno adulto.

Su cuerpo tiene forma de cilindro aunque destacan sus protuberantes dentículos dérmicos, que para nada son dañinos sino suaves y tiernos. Los colores de su piel son muy llamativos aunque por norma general presenta un tono con manchas más oscuras en las zonas laterales de este.

Su tamaño medio de mayor longitud es de 1,2 metros aunque por norma general, pocos ejemplares rebasan el metro de longitud. Sus dos aletas tienen forma de hoz y tiene una espina gruesa en la parte delantera, la cual es menos protuberante entre los tiburones cuernos que viven en los arrecifes que debido al roce con estos, sufren mayor desgaste.

Hábitat del tiburón cuerno

Los tiburones cuerno están presentes en el Océano Pacífico en las zonas de California hasta el golfo de esta zona. También los han visto en San Francisco, Ecuador y Perú.

Suelen vivir entrados y a once metros de profundidad en el mar aunque cuando llega la época fría se van hacia playas que alcancen los 30 metros de profundidad. No obstante, los más jóvenes que no alcanzan el medio metro de longitud, prefieren profundidades de 40 a 150 metros, y conforme crecen se mudan a aguas menos profundas.

Respecto a su territorio de movimiento rara vez rebasa los 1000 metros cuadrados de distancia. De hecho se cree que la distancia más larga recorrida por un tiburón cuerno ha sido de unos 16 kilómetros.

Cuando escogen un sitio para vivir pueden seguir ahí toda la vida, indiferentemente de que emigren, después de la migración vuelven al mismo lugar de origen. Esto es algo que pocos peces hacen.

Tiburón cuerno bebé.

Comportamiento

Cuando escuchamos la palabra ‘tiburón‘ la primera pregunta que se nos viene a la mente es si es peligroso. Pues no, el tiburón cuerno no lo es. De hecho, es un nadador lento y torpe, quizá porque su visión no es muy avispada. Le gusta estar solo y es un animal de noche, es decir, de noche está activo en busca de alimento mientras que de día se queda parado en un mismo sitio, el cual suele ser una cueva o una  grieta.

Se alimenta de moluscos con caparazón duro como cangrejos o erizos de mar por ejemplo. Se cree que su mandíbula tiene el poder de crear una mordida muy superior a la que debería según su tamaño.

Lo que hacen es succionar a su presa, la introducen en su cavidad oral y más tarde la llevan hacia sus dientes delanteros donde la destrozan a pedazos con la ayuda de sus dientes laterales.

Esto es todo lo que podemos contarte sobre el tiburón cuerno, una obra de arte de la naturaleza que nos ha sorprendido y que queríamos que tú también conocieras.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.